Hay cosas muy curiosas en el municipio de Manacor, en la ciudad y en sus núcleos turísticos y de población. La historia de la ocupación permanente de una acera en S'Illot no tiene nombre, además es muy peligroso. Hubo un derrumbe en un solar y sus propietarios dejaron todo sin poner orden. Una parte del vallado, sus hierros y la rejilla invadieron la acera hasta el extremo de ocuparla entera.

Los vecinos tienen que salir a la transitada calle por el asfalto porque entre los coches aparcados y los hierros no hay espacio para pasar una persona por muy delgada que esta sea. Esa calle es la que comunica la plaza del Llop con la playa, a la altura de un bar de tapas y el antiguo supermercado de la familia Mesquida.

El anterior Delegado de S'Illot durante varios meses intentó que quitasen la rejilla y los hierros de la acera, porque ocupaba la vía pública, toda la calzada petonal, incluso los coches que aparcan al lado lo tienen que hacer en el lado contrario del conductor porque no hay espacio y muchos riesgos. Tampoco consiguieron nada los inspectores del Ayuntamiento de Manacor, ningún éxito del departamento de Urbanismo. Se le instó a restablecer la normalidad perturbada y nada de nada, ahí sigue ocupada la acera para sonrojo del incumplimiento de las normas más elementales. Ni la policía local ha conseguido solucionar la infracción y el desacato.

Los residentes en S'Illot tienen todas las esperanzas puestas en el nuevo delegado de S'Illot Sebastià Nadal y en la responsable de Urbanismo Núria Hinojosa, ambos del PSOE, partido que se encarga ahora del litoral y la costa manacorina. Dicen que es muy sencillo, mandan una pala mecánica o a la brigada y meten todo en el solar, tal cual, hacen una rejilla nueva y se lo facturan al propietario.

Cuando este necesite algún permiso o algún papel de la administración, le pasan la factura. Una acción de oficio contemplada en la ley. Además deben sancionarlo por atentar contra el interés general, por poner en peligro a los ciudadanos y por ocupación ilegal de la vía pública. Ya está bien de impresentables.