Los ahorros de los Ayuntamientos nadie los tocará, el Congreso dirá no al decreto ley, el PSOE y Unidas/Podemos se quedan solos. La marea de críticas es completa entre la derecha, centro, izquierdas, liberales, regionalistas, nacionalistas e independentistas. Está claro que es una decisión muy desacertada y nada consensuada. 190 diputados de 350 tumbarán el decreto ley del acuerdo del Gobierno y la FEMP. No hay razón para hacer más teatro, los números cantan. En Baleares desde el mismo día que se anunció todos los rechazaron excepto PSOE y Podemos (dudas).

Una quincena de partidos que conforman el Congreso de los Diputados, que suman 190 diputados, por encima de la mayoría absoluta de la Cámara (176), han mostrado ya su disposición a día de hoy a rechazar el decreto ley que recoge el acuerdo entre el Gobierno y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para la liberación de los remanentes y el uso del superávit, que debe someterse a una votación de convalidación o derogación en el plazo de un mes.

En la Junta de Gobierno de la FEMP, el acuerdo tan sólo sumó los 12 votos a favor del PSOE, por los 12 en contra de PP, Junts y Ciudadanos. La abstención de Unidas Podemos y el voto de calidad del presidente socialista de la federación resultaron determinantes para aceptar la iniciativa, que provocó la ruptura del histórico consenso en la agrupación municipalista.

Partidos como PP, Vox, Ciudadanos, ERC, Junts, PNV, Bildu, Navarra Suma, Compromís, Foro Asturias, PRC, Coalición Canaria, Nueva Canarias, BNG, y la CUP que suman en torno a 190 escaños, vienen anunciando su voto en contra. De hecho, alcaldes de hasta nueve formaciones políticas distintas se han unido este viernes para aprobar una declaración conjunta de rechazo al decreto ley. Son los regidores de Bilbao (PNV), Cádiz (Adelante Cádiz), Granada (Cs), Lleida (ERC), Madrid (PP), Murcia (PP), Pontevedra (BNG), Reus (JxCAT) y Santa Cruz de Tenerife (CC), Zaragoza (PP) y Valencia (Compromís).

Lo de Cala Varques en Manacor en un sainete de la mejor figura. Un despropósito completo. Ayer se reunieron el Ayuntamiento de Manacor, los jueces, Govern, instituciones afectadas, Policía. Todavía están buscando papeles y trámites para la inminente intervención de los cuerpos de seguridad y desmontar todo lo que hay en el ANEI, las calas vírgenes y que se cumpla la Ley. Un año más les pillará el toro y se terminará la temporada con burlas y cachondeos.

La orden era clara sanción de 100.000 € y desmontar todo. Ni han pagado la multa ni desmontan nada. Las reuniones se suceden, hay que garantizar la seguridad jurídica de los okupas. Y mientras ellos se ríen cada noche después de hacer caja. Todo beneficios, derechos miles, ninguna obligación. No es un problema de abogados, ni de libertades. La justicia sigue sin reaccionar incomprensiblemente. Se incumplen decenas normas y reglamentos, leyes y preceptos, hay delitos. Quiere saber la autoridad judicial si se hicieron bien las notificaciones. El último que quite la luz.

Los infectados de COVID-19 durante esta semana en Baleares da vértigo, más de 500 en menos de 8 días. Esos son los datos fríos. Por supuesto la sanidad balear asegura que tienen controlados los brotes y que los ingresos en hospitales son mínimos. Atención primaria se cuida de la cuarentena y pasado el tiempo preceptivo se anula el peligro. Se controla a unas 3.000 personas en sus casas. Sabemos que mucho/as se saltan los protocolos, cierto y comprobado. Los vigilan por teléfono. Saben los horarios y que el servicio de control está desbordado.

Me contaba un doctor especialista en Coronavirus que las secuelas de quienes superan los positivos sin síntomas son muy importantes y dañinas. Esos jóvenes que se burlan del virus, tendrán algunos en un futuro problemas respiratorios, coagulaciones, pérdida parcial del sabor e incluso algún incidente coronario y cerebral (ictus). Que respeten lo que dice la ciencia, luego todo serán lágrimas. Rafael Gabaldón San Miguel.