Editorial: Las altas temperaturas desvelan que puede generarse en el Mediterráneo una Gota Fría y DANA en Baleares y sobre todo en Mallorca, por eso muchos expertos, ASAJA, partidos políticos, especialistas, advierten que muchos torrentes están sucísimos porque no se lleva a cabo una política decidida, rigurosa, selectiva y efectiva de limpieza. Se alerta de los graves problemas a los que se enfrentará Mallorca y Baleares cuando comiencen las lluvias. Se debe actuar de forma inmediata y ganar tiempo sea como sea. En Mallorca, por desgracia, conocemos las consecuencias que puede tener una fuerte riada. Es lamentable que, a sabiendas de lo que puede pasar y conociendo las alertas que están dando los expertos, no se esté haciendo nada. Es así de claro, vemos torrenteras llenas de hierbas y muchas rodeando pueblos y ciudades, e incluso poblaciones que reciben cuencas de agua abundantes. Deben dar una explicación del porque no se limpian, a veces la seguridad de los residentes en las poblaciones, sus vidas, están por encima de ciertas consideraciones medio ambientales, en ocasiones erróneas. Importante abrir un debate, no todo vale para estar de brazos cruzados. Todos recordamos las torrentadas mortales de Manacor, Felanitx, Sant Llorenç, Artà.

Las nuevas generaciones de Cala Mendia, Cala Magrana, Cala Anguila y Playa Romántica, las conocidas como 4 Calas del litoral manacorí, deben tomar cartas en el asunto y dedicar algún tiempo en recuperar el pulso de la localidad que generaron durante 21 años los anteriores directivos de la Asociación de Propietarios y de Vecinos, que lideró Manuel Gaya y un equipo entusiasta, hasta que llegó la pandemia y se les ha echado encima la edad. No puede entenderse que una zona joven donde residen una media de 800 vecinos de manera ininterrumpida todo el año y casi 1.500 personas en verano, dejen de lado la parte social, económica, festiva, de identidad, de servicios, de las cuatro urbanizaciones. Están sin municipalizar y el Ayuntamiento cobra todos los impuestos y tasas, como en las mejores partes del municipio, pero a la hora de dar servicios, siempre alegan que como son privadas y están sin recepcionar no se puede hacer nada. Por eso en Cala Mendia, Cala Magrana, Cala Anguila y Playa Romántica, no hay colegio, centro de salud, retén de la Policía, Centro de día, oficinas municipales, plan de embellecimiento, nuevas aceras, fondos europeos, etc. Este año tendrán una fiestas de parcheo, su Feria Nocturna, y alguna actuación musical para niños y mayores. Olvidado queda el resto del programa, además sin asociación, quién se cuidará del mantenimiento si nadie baja a Manacor a demandarlo, día si y otro también. Lamentable.

Mi aplauso a los residentes en Mallorca y Baleares con respecto al cuidado que han demostrado con el territorio. Unos pocos conatos de incendios, bien apagados por las emergencias, y nada más. Está todo seco, casi polvoriento, árboles necesitados de agua, malezas, malas hierbas, zonas de montañas con completa sequedad. Sin embargo se mantiene a raya los peligros. Se han limpiado a conciencia todos los arcenes de las carreteras, por si alguna colilla de tira por la ventana de un vehículo, todo suma para evitar la propagación. Ninguno, nadie que tenga una casa en el campo hace fuego en las inmediaciones, ni lo permite a sus inquilinos, sean privados o de casas vacacionales. Respeto absoluto al fuego y sus descuidos. Tanto rigor nos pone a la cabeza de la responsabilidad, se han quemado en España 660.000 hectáreas, cientos de viviendas, miles de cosechas, maquinaria. Se ha dejado sin vivienda a millones de especies. Aquí se pueden contar con las manos las hectáreas quemadas y en cuanto hay un aviso se pone en marcha el efecto acordeón de emergencias y se llega a todos los rincones con celeridad de vértigo. Mi felicitación a quienes vivimos en estas islas y a cuales nos visitan que han demostrado empatia por nuestro pequeño y endeble universo. Tenemos que cuidarlo como oro en paño, es nuestra vida, sin nuestra vegetación, somos cadáveres. Siempre hay garbanzos negros y enfermos en toda sociedad, de momento predomina la responsabilidad. Rafael Gabaldón San Miguel.